El término cohesión tiene su origen en el término latino “cohaesus”, que significa adherirse o mantenerse unido-a. Carron, Brawley y Widmeyer (1998) definen la cohesión como: “Un proceso dinámico reflejado en la tendencia de un grupo a no separarse y permanecer unido en la búsqueda de sus metas y objetivos instrumentales y/o para satisfacer las necesidades afectivas de sus miembros-as”.

Para mí esa es la clave de un equipo, permanecer unido para la consecución de los objetivos, porque el grado de cohesión de un equipo tiene consecuencias directas sobre su nivel de rendimiento. Si no hay un objetivo, no hay cohesión. Se podrá trabajar, pero sin ninguna coordinación entre las personas, en la que cada una realizará su trabajo de forma individual y sin que afecte al resto de compañeros-as. Esto no es un equipo.

En el deporte colectivo, la cohesión es un proceso dinámico del equipo que puede fluctuar a lo largo del año. Cuando por ejemplo se está en el momento cumbre de la temporada, es necesaria una mayor implantación de la cohesión. Sin embargo, cuando se atraviesa un periodo que no se decide nada, un cierto debilitamiento de la cohesión puede ser beneficioso para estimular el rendimiento individual.

Pensemos que es necesario que los-as deportistas descansen del esfuerzo que supone la interacción colectiva. Además, con este “descanso” controlado, se puede conseguir que los jugadores-as tengan más energía para cuando el equipo necesite una cohesión más sólida. 

Estos son los factores que afectan al desarrollo de la cohesión:

• Los factores ambientales o situacionales: Representan las fuerzas normativas que mantienen unidos-as a los-as integrantes del equipo (proximidad geográfica, tipo de contrato, vestimenta…)
• Los factores personales: Son las características individuales de los-as componentes del equipo (semejanzas y diferencias entre ellos-as, el género, aspiraciones, expectativas, adhesión, satisfacción individual…)
• Los factores de liderazgo: Las conductas y el estilo de liderazgo que adoptan los-as líderes (entrenadores-as…) y las relaciones que establecen con el equipo (la conducta, el estilo de liderazgo, la comunicación, las relaciones interpersonales…)
• Los factores de equipo: Nos referimos a las características de las tareas del equipo (normas, roles, objetivo colectivo, deseo del éxito, estabilidad del equipo…)

Si nos referimos a la cohesión en los equipos deportivos, los entrenadores-as, como líderes del vestuario, son los encargados-as de potenciar y optimizar la cohesión del equipo para mejorar el rendimiento y obtener resultados en la competición.

Cito algunos aspectos que pueden ayudar a mejorar dicha cohesión:

• Estilo de liderazgo, su carisma. Habilidades para involucrar y motivar.
• Establecer normas de funcionamiento (código de conducta y valores) aceptadas por todos-as (pactos/alianzas).
• Conocer personalmente a cada deportista (atención exquisita al trato personal). Apoyo emocional.
• Explicar la importancia de la aportación que hace cada persona al equipo.
• Crear o reforzar una señal de identidad grupal con la que los jugadores-as de un mismo equipo se sientan identificados-as (sentimiento de pertenencia).
• Establecer objetivos colectivos estimulantes y alcanzables (celebrar su consecución).
• Manejar correctamente la comunicación: lenguaje verbal, no verbal, asertividad, empatía, escucha activa…
• Evitar la formación de subgrupos y la competitividad. Todos-as son iguales, cada deportista ejecuta su rol.
• No hacer distinciones y evitar los comentarios sobre algún-a integrante del equipo a otro-a componente (entender las diferencias individuales).
• Conocer algún dato personal de los miembros-as del equipo: cumpleaños…
• Insistir en el juego colectivo, proponiendo tareas cooperativas.
• Crear dinámicas de grupo para conocerse e integrarse: internas y externas (comidas, actividades extradeportivas…) Imprescindible para las nuevas incorporaciones.
• Proporcionar refuerzos positivos: en los entrenamientos, partidos… (animar, apoyar…)
• Generar motivación.
• Evaluar el clima del equipo (consultar, preguntar).
• Gestión de conflictos. Resolver los conflictos entre compañeros-as de forma inmediata y sincera (empatía…)
• Celebrar reuniones con los-as líderes (jugadores-as influyentes) del vestuario para mantener y reforzar la importancia de la cohesión en el equipo.
• Dentro de la planificación general de la temporada, establecer un plan de actividades destinadas a mejoras de la cohesión.